Todas las argentinas abortaron, en promedio, dos veces a lo largo de su vida. Esta cifra está dada por el Ministerio de Salud de la Nación y pone en evidenciauna verdad áspera y definitiva: más allá de compartir la posibilidad de dar a luz, las mujeres están unidas por la experiencia común -y tanto menos luminosa- de haber interrumpido un embarazo. A todas, dicen las estadísticas, les ha ocurrido. Y para esas "todas" -las pasadas y las futuras- surgió, el 31 de julio pasado, una línea telefónica gratuita -llamada "Aborto: más información, menos riesgos"- que busca dar asesoramiento acerca de la interrupción farmacológica de un embarazo, y que en poco más de un mes dio dos batacazos en la opinión pública. En primer lugar, la organización no gubernamental (ONG) Lesbianas y Feministas por la Descriminalización del Aborto, a cargo de la gestión de esta línea, se animó a abandonar las disertaciones ideológicas y asumir el riesgo de dar asesoramiento prácticopara abortar . Y en segunda instancia, en el día de ayer esta misma ONG presentó un balance del primer mes de actividad de la línea telefónica, y lo hizo en un escenario inédito en la historiaargentina: el Salón San Martín de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires. (Leer noticia completa)
La Agrupación de Mujeres Pan y Rosas, que impulsa la Campaña Latinoamericana por el derecho al aborto, adhiere a la "Declaración por la Información Pública para abortar más seguras", impulsada por Más información, menos riesgos.
Como señalamos en un reciente Comunicado de Prensa,"defendemos el derecho democrático de las mujeres a la interrupción voluntaria del embarazo, bajo cualquier circunstancia y buscando todas las alternativas posibles para la reducción de riesgos (...) Defendemos también este derecho, contra el ataque de la Iglesia y la derecha reaccionaria, como asimismo de las instituciones del Estado que reprimen y penalizan a las mujeres y de la negativa del gobierno nacional que sigue sosteniendo que el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos es ´política criminal´"
Porque no queremos ni una muerta más por las consecuencias del aborto clandestino, exigimos:
- Educación sexual laica y científica, en todos los niveles educativos, para decidir.
- Anticonceptivos gratuitos en todos los centros y salas de salud, para no abortar.
- Aborto legal, libre, seguro y gratuito en todos los hospitales públicos y ante la sola decisión de la mujer, para no morir.- Separación de la Iglesia del Estado